Miel licuada
Las propiedades de la miel
Al licuar la miel, la primera pregunta es qué propiedades de la miel deben conservarse.
A temperaturas superiores a 40 °C, las enzimas se destruyen y los nutrientes se pierden.
Para preservar las propiedades positivas de la miel, nunca debe superarse esta temperatura.

Ajuste del termostato
Licuefacción suave
Para no superar la temperatura máxima de 40°C, ajuste el termostato a un máximo de 4. Así se licua suavemente la miel y se conservan los nutrientes y las enzimas.
Las temperaturas objetivo
Para alcanzar la temperatura de consigna, el termostato conecta el condensador cuando se alcanzan temperaturas mínimas y lo desconecta de nuevo cuando se alcanza una determinada temperatura por encima de la temperatura de consigna, en función del ajuste del regulador. ¡¡¡!!! Atención: Se supera la temperatura objetivo de 40 °C, pero el proceso se acelera considerablemente.
- Ajustar el mando a “2” corresponde a una temperatura de unos +20° C.
- Ajustar el mando a “7” corresponde a una temperatura de aprox. +40° C.
- Ajustar el mando a “11” corresponde a una temperatura de aproximadamente +70° C.
- Ajustar el mando a “max” corresponde a una temperatura de aproximadamente +100° C.
Iniciar el proceso
Para iniciar el proceso, coloque el condensador sobre la miel, ajuste el control del termostato como se ha descrito anteriormente, preste atención a la temperatura máxima y ponga en marcha el condensador enchufándolo.
Conclusión
Es importante ajustar correctamente el termostato del licuador de miel. Para conservar las propiedades positivas de la miel, la temperatura nunca debe superar los 40 °C. El ajuste correcto es poner el control del termostato en 4.
Si es necesario calentar la miel rápidamente sin preservar sus propiedades, basta con ajustar el termostato a la temperatura deseada.

Un soporte sencillo para el licuador de miel
Para asegurarse de que el licuador de miel se sumerge recto y no puede volcarse por influencias externas, por ejemplo, basta con construir un soporte con una abrazadera de tubo y un poco de madera.
La placa de la parte inferior estabiliza el soporte a través de la miel. El condensador puede sumergirse directamente y optimizar así el desarrollo del calor.
El peso del licuador presiona el pie contra la miel.
Otra ventaja es que el soporte ofrece siempre al condensador una buena opción de almacenamiento.
